Aunque es posible operar con un capital más reducido, para conseguir una buena diversificación y que las comisiones ronden unos niveles aceptables, habría que empezar con unos 10.000-20.000 Euros. Todo dependerá de su situación actual y de los resultados que quiera conseguir.
Invertir pequeñas cantidades es viable cuando su estilo de inversión es a largo plazo, cuando destina una cantidad al mes para aumentar la cartera o si tiene pensado reinvertir los dividendos. Por el contrario, no es recomendable si pretende invertir a corto plazo o si no reinvierte sus dividendos.
Aunque lo ideal es invertir con cantidades mayores, no deje que su capital inicial le comprometa. Es mejor empezar con poco dinero y aprender, que no empezar nunca.